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Mostrando las entradas de marzo, 2016

Salmo#7: Mi escudo es el Justo Poderoso

Mi escudo es el Justo Poderoso Salmo #7 Canción de Lamento De David Esta canción le cantó a Yehováh respecto a las palabras de Cush el benjaminita. ¡Oh Yehováh mi Poderoso! En Ti he buscado refugio, líbrame de todos los que me persiguen, rescátame para que no hagan pedazos mi alma, sin que haya quien me libre. Oh Yehováh, Si esto he hecho: Si ha habido maldad en mis manos, si he devuelto mal al que me hizo el bien, y si he despojado a mi adversario sin razón, entonces que el Enemigo persiga mi alma, que domine mi vida y la pisotee en la tierra, y que mi gloria quede tirada en el polvo. (Pausa para meditar) Levántate, ¡Oh Yehováh! en tu furor. Elévate contra la pasión de mis adversarios. Ilumina en mi favor el veredicto que has decretado.  Que una asamblea de gentes te rodee,  y que desde lo alto te dirijas hacia ellos. Yehováh! Tú que juzgas a la gente, Hazme justicia según mi rectitud y según la integridad que haya en

Salmo #6 ¡Cúrame Oh Yehováh!

¡Cúrame Oh Yehováh! Salmo #6 Al supervisor: Un salmo de David para instrumentos de cuerda. ¡Oh Yehováh! En ira no me corrijas, Ni me censures en indignación. Se bondadoso conmigo, porque estoy enfermo. ¡Oh Yehováh! Cúrame, ¡Oh Yehováh! Porque mis huesos están temblando. Mi alma está muy atribulada  Y Tú ¡Oh Yehováh! ¿Hasta cuando? ¡Vuélvete oh Yehováh! Por causa de tu bondad rescata mi alma. Porque en la inexistencia no hay recordarse de ti; En el Sheol... ¿Quién alzará sus manos en alabanza a ti? Estoy exhausto de tanto lamentarme,  Empapo mi cama por la noche,  con lágrimas disuelvo mi lecho. Mis ojos se han reducido debido a la vejación, Se han consumido a causa de mis adversarios. ¡Apártense de mí los obreros de transgresión! Porque Yehováh ha escuchado la voz de mi lamento. Yehováh ha prestado atención a mi súplica, ¡Yehováh ha recibido mi oración! Que mis enemigos se avergüencen y tiemblen de

Salmo #5 La herencia del Justo

La herencia del Justo Salmo #5 Al supervisor  "Para instrumento de viento" Mis dichos escucha, ¡oh Yehováh! considera mi meditación. Presta atención a la voz de mi súplica, ¡Mi Rey y mi Poderoso! Porque a ti te oro habitualmente. En la mañana escuchas mi llamado, ¡ohYehováh! En la mañana esperaré en ti mirando hacia arriba. No eres Poderoso que se complace en la maldad, la maldad no habita en Ti. Los jactanciosos no se sientan frente a ti, son removidos de ante tus ojos. Tu odias a todos los que practican idolatría, haces que desaparezcan los que hablan falsedad. A Yehováh le es abominable el asesino y el hombre que practica el engaño. Pero en cuanto a mí: Gracias a tu abundante bondad entraré en tu casa. En temor te adoraré rostro a tierra dirigido hacia tu santo templo. Oh Yehováh, guíame hacia tu justicia por razón de mis enemigos, allana tu camino ante mi rostro . Porque la rectitud está ausente de la boca de el

Salmo #4 Yehováh responde al que le sirve

Yehováh responde al que le sirve Salmo #4 Al Jefe de los músicos, para cuerdas,  Salmo de David. En mi llamado respóndeme, ¡Oh Poderoso de mi justicia! En la adversidad me socorriste, favoréceme y escucha mi oración. Hijos de los hombres, ¿hasta cuando es mi gloria causa de vergüenza? ¡Ustedes aman una cosa vana! ¡Van tras una mentira! (Pausa para meditar) Pero sepan que Yehováh toma en cuenta quien le sirve, Yehováh me escuchó cuando lo llamé. ¡Estén atemorizados pero no pequen! Hablen en su corazón o en su cama, y luego callen.  (Pausa para meditar) Sacrifiquen ustedes sacrificios de justicia, ¡Apresúrense a refugiarse en Yehováh! Muchos están diciendo: "¿Quién nos ha hecho ver el bien?" ¡Levanta hacia nosotros la luz de tu rostro! ¡Oh Yehováh! Tu has puesto regocijo en mi corazón, cuando su grano y su vino nuevo se multiplican. En paz y en armonía me acuesto y duermo, porque Tú, Oh Yehováh, Tú solo,  ¡me

Salmo #3 ¡Sálvame, oh mi Dios!

¡Sálvame, oh mi Dios! Salmo #3 Un salmo de David, cuando huía de Absalón su hijo. ¡Yehováh! ¿Por qué han aumentado mis enemigos? ¡Son muchos los que se levantan en mi contra! Muchos están diciendo acerca de mi alma: '¡No hay salvación de parte de Elohim!" Pero Tú Yehováh: ¡Eres mi escudo y mi gloria! ¡Eres quién me hace levantar la cabeza! Clamo a Yehováh con mi voz, ¡y Él me contesta desde su Santa Montaña! Yo me acuesto, y me duermo, pero despierto porque Yehováh me sostiene, ¡No temo a las multitudes que me han sitiado! ¡Yehováh es Salvación! ¡Bendito es su Pueblo!

Salmo #2 ¡Besen al Hijo!

¡Besen al Hijo! Salmo #2 ¿Por qué se han alborotado las naciones? ¿Por qué mascullan cosas sin valor? Los reyes de las naciones se reúnen en consejo, y los gloriosos complotan en unidad  en contra de Yehováh, y en contra de su Ungido: "¡Rompamos sus ataduras! ¡Echemos fuera sus cuerdas!" Aquel que se sienta en los cielos se ríe, Yehováh se mofa de ellos; entonces les habla en su ira,  y en su enojo los aterroriza. "¡En Sión mi Santa Montaña, Yo he ungido con aceite a mi Rey!" Recuento el decreto de Yehováh cuando me dijo: "Tu eres Mi Hijo, Hoy Yo te he producido como Padre. Solo pídemelo, y te daré las naciones como herencia, y los extremos de la tierra como posesión. Las subyugarás con una vara de hierro, Y las desmenuzarás como un vaso de alfarero." Por lo tanto, Oh Reyes: ¡Actúen sabiamente! Ustedes jueces de la tierra queden advertidos... ¡Sirvan a Yehováh con temor,  y regocíjense